Tantas veces se ha escuchado acerca de esta Ley Universal Superior, que en cierto punto se ha desvirtuado. Gente convirtiéndola en una mera frasecita sin sentido tal como “como es arriba es abajo” y poniendo las raíces de un árbol en el cielo y en la tierra. Pero... ¿Qué significa esto? ¿Qué tiene que ver que arriba y abajo sean similares con algún progreso en mi vida? Hay tantas preguntas que uno se podría hacer e igualmente la respuesta está tan oculta y tan a la vista que es trabajo de un Maestro detectarlo. Y no estoy hablando de un Maestro externo, sino el Maestro en vos. El cual VOS MISMO formulás y hacés presente cada vez que sea necesario para avanzar en la vida.
Antes que meternos con temas que abarcan demasiada abstracción para recorrerlos, vamos a comenzar por el principio de todo: ¿Qué significa el matema “Como es arriba es abajo; como es abajo es afuera”?
Para responder esta pregunta tenemos que remontarnos a lo explicado en anteriores posts. Todo lo que uno emana se amplifica y densifica / materializa / cristaliza (o como quieras llamarle). De esta manera, todo lo que vemos en nuestra realidad, en nuestra vida cotidiana, en esta y en todas nuestras encarnaciones y experiencias en otros planos y/o dimensiones, es el resultado de lo que nosotros hemos emanado. Es por eso que Buda mencionaba en su primera encarnación: “Nada es, sino yo”. Ese matema fundamental engloba todo el significado de lo que hablamos anteriormente, y mucho más. Todo lo que ves reflejado en tu vida cotidiana, todo lo que podés percibir a través de tus sentidos, es emanación de tu estado. O en otras palabras (aunque hay que tener mucho cuidado con el verbo que viene), todo lo que ves en tu realidad es una emanación de lo que vos sos. O sea, lo que la Ley de Correspondencia y el matema de Buda profesan.
Entonces… ¿esto quiere decir que mi realidad, de hecho, no es LA realidad, sino que es una emanación mía y es solamente una ilusión que refleja lo que verdaderamente está ocurriendo en mi interior? SÍ. La “realidad” no es un lugar en el que basarse, ya que éste no es el origen de las cosas. Por ejemplo, la ciencia se basa en “hechos” creyendo ciegamente en que la realidad, lo que vemos en la práctica, es lo verdadero, lo que tiene sustento, y que desde ahí se origina todo. Cuando en realidad, la realidad es sólo el resultado de un complejo mecanismo de funcionamiento universal que se origina desde dentro de cada quién. ¿Acaso conocés el “efecto observador”? Este es aclamado por la ciencia, descubierto por la cuántica, que profesa que lo que ocurra en el experimento es solamente una proyección de lo que el observador (el científico, en ese caso) está deseando medir y está deseando que ocurra o no ocurra. Mesura dentro de determinado espectro y por eso lo que ocurre en su experimento es exclusivamente dentro de los márgenes que éste científico le colocó antes de comenzarlo. Esto es una clara prueba que, por un lado, rompe todo paradigma científico que defiende, o al menos defendía, que lo “real” (lo denso, incluida la energía) define todo lo demás, y por otro lado, que lo que ocurre dentro tuyo define lo que ocurre en tu realidad. Es por eso que si controlás conectadamente tus pensamientos (como enseñé a hacerlo en el post de la Ley de Mentalismo), lo que va a ocurrir es que vas a lograr decidir qué emanar a tu realidad; qué deseás que se densifique. Aunque parezca imposible, para el Universo jamás será imposible. Pensalo así, el Universo, la vida, la esencia, todo, absolutamente todo fue creado alguna vez, y valga el sarcasmo, calculo que no va a ser muy difícil para el Universo materializar lo que vos estás deseando, aunque a vos te parezca imposible. Literalmente, si lo podés visualizar, es algo posible de realizar.
Esta Ley Universal Superior nos muestra el funcionamiento del Universo cuando se trata de comprender que no existe algo así como adentro y afuera, sino que eso es una ilusión, y verdaderamente adentro y afuera no están verdaderamente diferenciados. Es solamente una construcción mental automática que nos establecieron a pensar, y ahora la creemos como verdad aunque jamás hayamos indagado en ella. Esas construcciones mentales son las que hay que disolver desde lo sutil, desde nuestro viaje interior para lograr avanzar, paso a pasa, sin apurarnos, mas llevando prisa. Porque la presión y la prisa son divinas, pero el apuro es, literalmente, impuro.
La Ley de Correspondencia nos explica un punto sumamente importante que mencioné en el post anterior de la Ley de Vibración (hacé click verlo) “lo que no hayas resuelto dentro, se verá densificado fuera”. Esto, con otras palabras, es lo que mencioné en aquel post. Y realmente denota magníficamente lo que la Ley de Correspondencia nos explica. Lo que esté emanando desde mi, se verá amplificado y densificado en mi realidad. Por lo que, si mi inconsciente, mi yo, mi ego (todos nombres de lo mismo) está en control de eso que no aporta a tu vida y vos no hacés tu viaje interior, lo vas a continuar emanando en tu realidad. Y de esta manera la estarás manchando con la amplificación de lo peor en vos.
De esta forma, cuando veas que hay algo en tu realidad que no es lo que vos estás deseando que ocurra, siempre preguntate: ¿qué estoy emanando en mi que genera esto fuera? Siempre lo que veas en tu realidad, será una copia densificada de lo que emanás por dentro. Así que la única opción de darte cuenta qué es lo que estás emanando, si es que esto está oculto a tu consciente, es abstraer lo que ocurre fuera. Por ejemplo, si tenés que irte de viaje y se te rompe el coche justo cuando estás por salir, tenés que comprender qué ocurre en lo que ocurre en esa situación. Abstraerlo, sutilizarlo, sublimar lo denso a un registro sutil, de una manera muy sencilla: ¿Qué representa en esencia lo que está ocurriendo en mi realidad? En este caso del auto que se rompe, podría ser tu miedo de emprender en la vida hacia nuevos destinos. O por el contrario, podría significar que no querés ir al mismo lugar que siempre, entonces por no hacerte responsable de ese pensamiento, éste se densifica y se te rompe el auto, materializando tu deseo más profundo: no ir de viaje (más allá de que digas que querés ir y te auto-engañes haciéndote creer que es así).
Es por eso que si te enfocás en algo, aunque lo niegues con el pensamiento o la palabra, el simple hecho de enfocarte en eso, hace que lo estés emanando, que vibres afín (hasta cierto punto) a eso, que lo comiences a atraer a tu vida y que, tras algún tiempo, lo veas densificado en todo su escalofriante esplendor. Como es adentro, es afuera. Como ves, por separado es fácil detectar cuando actúa una Ley y cuando actúa otra. Pero en este caso, aunque no lo hayas notado, actuaron las 7 Leyes Universales Superiores y las Leyes Universales Subyacentes también. Cada una en determinada manera, pero todas estuvieron involucradas, y muchas a la par.
Para dejar más en claro por qué la frase dice “como es adentro es afuera y como es arriba es abajo”, lo explicaré:
Arriba hace referencia al cielo, arriba, que a su vez, hace alusión al registro de lo sutil, de lo simbólico. Lo estructural que emana algo que luego, al llegar abajo, a la tierra, a lo denso/tu vida cotidiana/tu realidad será perceptible por los sentidos.
Ahora que entendés mucho más acerca de esta Ley, leer esta frase te resulta sumamente simple. Hasta incluso podrías preguntarte “¿Pero cómo no me di cuenta antes que refería esto? ¡Si es super simple!”. Y ahí tenés la respuesta a porqué lo oculto es invisible a los ojos, pero está delante de éstos todo el tiempo.
En todos estos párrafos, especialmente en los últimos, he descrito la manera de solucionar cada problema en tu vida, desarraigándote de toda limitación mental por parte de tu ego, y que, si lo lográs, avances hacia tu propia realización con cada paso. Quizás aún permanece muy oculto. Pero no te preocupes, un texto puede develar todos sus secretos al ritmo en el que vos estés listo para hacerlo.
Si querés comprender de manera exacta los fundamentos básicos de cómo crear la realidad que deseás, mantenete atento a toda esta serie de posts acerca de las Leyes Universales Superiores y Subyacentes. Y una vez leídas, entendidas, comprendidas y concluidas, lograrás indiscutiblemente, si haz hecho bien tu trabajo, crear la realidad que deseás. Al menos, en una etapa primaria, desde la cual puedes elegir continuar avanzando para lograr resultados cada vez más superiores y continuar encaminándote de esta manera a tu elevación como esencia, integrándote con el Todo.
Muchas gracias por leer este post, y ojalá les haya aportado tanto como a mi al momento de aprehender todos estos conceptos.
Saludos y que tengas un excelente día,
Ezequiel